En el contexto de la crisis sanitaria que nos encontramos viviendo a nivel mundial,
hemos sido testigos de múltiples cambios que han alterado el normal funcionamiento de las
rutinas en la vida cotidiana y que han afectado el estado emocional de las personas.
Es sabido que la pandemia ha provocado efectos adversos en todo el mundo, desde
cambios en el medio ambiente hasta en el estado emocional de las personas. En este contexto, algunas de las consecuencias que ha conllevado el Covid 19 han sido el confinamiento (como estrategia preventiva), forzando principalmente el aislamiento social que hemos debido instalar en nuestras vidas, obligándonos a respetar el distanciamiento físico y social, evitando el contacto con nuestros seres queridos y, por consiguiente, la alteración completa de nuestras rutinas (inicio de tele-escuela y teletrabajo, cuidado de los(as) hijos(as) todo el día, principalmente). Por otra parte, las apremiantes amenazas en esta etapa, como inestabilidad laboral, enfermedad y/o contagio de algún familiar, pérdida de un ser querido por Covid, etc., son situaciones que han mermado el normal desempeño de todas y todos, traduciéndose en una disminución de la productividad… en desmotivación y desesperanza.
La situación actual nos expone inevitablemente a un futuro incierto, donde existen diversas especulaciones en torno a la incertidumbre que genera lo que ocurrirá después de
finalizada la pandemia. Preguntas como ¿Qué pasará? ¿A dónde nos llevará todo esto?
¿Volverá todo a la normalidad en algún momento? ¿Qué será de mi vida?, etc., afectan de
manera importante el desempeño y el rendimiento de las personas, tanto académico como
laboral, generando la sensación inestabilidad frente a lo difícil que puede resultar adaptarse
contantemente a éstos y a eventuales cambios. Por esta razón, resulta imperioso contar con
actividades de autocuidado que reporten sensación de bienestar emocional y que resulten
motivantes para cada todas y todos, sin distinción de edad, ya que tanto niños como adultos se han visto afectados desde diferentes ámbitos.
Más aún en estos momentos, recursos como la motivación e inspiración resultan ser
fundamentalmente necesario para las personas. Poder contar con un testimonio de vida que dé cuenta de que es posible sobreponerse y salir adelante, pese a lo desafiante que pueda resultar un obstáculo, constituye un ejemplo de superación y una inyección de energía que logra transmitir el mensaje de que pase lo que pase, siempre es posible avanzar.
En DECIDIDO! sabemos que es posible adaptarse a los cambios y conocemos en
terreno que es posible identificar un evento adverso como una oportunidad de crecer cada día.